Algunos veterinarios utilizan tratamientos con células madre para mejorar casos de artritis degenerativa, si bien según los dueños de las mascotas, éstas mejoran, no existe comprobación científica que avale estas afirmaciones.

El veterinario Kristin Kirkby, de la Universidad de Florida utilizó el tratamiento con células madre en una perra de cinco años, a quien se le habían vuelto inútiles las patas traseras a causa de una artritis reumatoide. La única manera de traslado de Lucy, era deslizándose por el suelo con sus patas delanteras. Según sus dueños, la perra mestiza (cruza de labrador con caniche) ha mejorado muchísimo desde el comienzo del costoso tratamiento. Ya no aúlla ni gime de dolor, tampoco utiliza tantos medicamentos como solía hacerlo antes. Carol Fischman, propietaria del can afirma que nunca esperaron que viviera tantos años, pero que gracias al tratamiento con las células madres hay una mejora en la calidad de vida de su perra.

Aunque no se ha hecho ningún estudio sobre el tratamiento que cuesta alrededor de 2.500 a 3.000 dólares cada uno, miles de equinos y canes con artritis degenerativa han sido sometidos al tratamiento. Según Kirby, los resultados de cinco procedimientos parecidos han sido muy buenos, pero siempre han sido reportados por sus dueños y no por expertos en el tema. Muchos propietarios de estos animales con dificultades motrices aseguran que sus mascotas tienen mayor facilidad para desplazarse.

Sin embargo, varios expertos afirman que no hay suficiente evidencia de que el tratamiento sea el responsable de la mejoría. Tampoco existe ningún estudio que verifique la efectividad de las células madre.

Según Kirby, la universidad tiene planeado comenzar con un estudio para evaluar la efectividad. Comenzarán a inventariar los dolores presentados en los animales antes y después del tratamiento y así medir los cambios.

Actualmente en California existe una compañía llamada Vet-Stem que a partir del año 2003 comenzó a desarrollar la terapia con células madre en caballos y perros. Las células las obtiene a partir de muestras de tejido graso tomadas de canes y equinos de todo Estados Unidos. Hasta el momento se atendieron a 3.500 caballos y 1.500 perros. Para fines de este año planean comenzar terapias con felinos.

La empresa utiliza el tratamiento principalmente para tratar la osteoartritis, lo que implica la pérdida de cartílago en las articulaciones ya que según ellos, la terapia permite reemplazar los cartílagos perdidos y demás tejidos. Sin embargo, Vet-Stem está comenzando a investigar la aplicación del tratamiento a otras patologías.

Fuente: Portal Veterinaria