Método de investigación in vitro podría evitar experimentación con animales
- 12 de noviembre de 2009
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Un método de investigación in vitro desarrollado por la empresa biotecnológica Advancell podría evitar la utilización de animales para la experimentación médica del cáncer, finalidad para la que cada año se destinan 12 millones de animales en Europa.
El modelo desarrollado por Advancell supone la utilización in vitro de células humanas para investigar los efectos farmacológicos y toxicológicos de los nuevos medicamentos en el ser humano, permitiendo eliminar el uso de animales en los experimentos científicos, lo que salvaría anualmente a 12 millones de animales en Europa, 760.000 de ellos en España, destinados a este fin.
«El modelo supone la utilización in vitro de células humanas para investigar los efectos farmacológicos y toxicológicos de los nuevos medicamentos».
El nuevo método permite reducir de 100.000 euros a 10.000 los costes por cada programa experimental y rebajar el tiempo de duración de los ensayos de varios meses a tan solo unas semanas, informa la empresa biotecnológica en un comunicado.
El proyecto responde a las necesidades impuestas para el cumplimiento de la directiva europea Investigación, Evaluación y Autorización de Fármacos (REACH), que obliga a comprobar, antes del año 2013, los efectos que sobre los humanos y el medioambiente pueden tener los 30.000 compuestos químicos de cuyos efectos no se dispone de información suficiente.
Este imperativo legal supondría un incremento considerable de experimentos con animales en los laboratorios, por lo que la UE financia proyectos alternativos como el denominado Carcinogenomics de experimentación in vitro para acelerar la investigación y reducir el número de experimentos con animales y en el que Advancell es el único representante español.
La investigación in vitro permite además comprobar a la vez los efectos de varias sustancias químicas en una misma muestra de células humanas al contrario de la experimentación con animales, en el que cada compuesto debe ser comprobado por separado en individuos diferentes.
El cumplimiento de la normativa REACH supone una fuerte inversión en investigación por parte de las industrias químicas para certificar los efectos y la seguridad de sus productos, de los que España es el segundo exportador mundial y cuya producción supone el 10% de su Producto Interior Bruto (PIB). EFE