La prueba de ácido biliar total fue efectivo en el diagnóstico
- 22 de diciembre de 2015
- Tiempo de Lectura: 5 Minutos
Autor Colaborador: Mamoru Onuma, DVM, PhD
Oosagami Animal Clinic
Saitama, Japón
La prueba de ácido biliar total (TBA, por sus siglas en inglés), que tiene una alta sensibilidad para las enfermedades hepáticas, es una prueba esencial al momento de evaluar los trastornos hepáticos. En Japón; sin embargo, solo se puede depender de pruebas médicas subcontratadas y aún no es posible una rápida medición. Mediante la utilización del sistema de laboratorio VetScan, se puede obtener en algunos minutos los resultados de las pruebas bioquímicas, incluyendo las mediciones de TBA, lo que permite un diagnóstico y tratamiento rápido.
Andy, un Yorkshire terrier macho de 7 meses de edad, fue llevado a la clínica para realizarle una operación de castración. Durante la evaluación física, Andy se mostró sano y no presentó ningún signo clínico particular de enfermedad. Se observó niveles elevados de ALT y ALP en un análisis de sangre preoperatorio (Tabla 1).
No se observó hipoalbuminemia ni BUN bajo, que a menudo aparecen en casos de trastornos hepáticos congénitos (principalmente, derivación portosistémica) y en el examen de rayos X del abdomen no se encontró microhepatía. Sin embargo, considerando la edad de Andy, se sospechó un trastorno hepático congénito y se midió el ácido biliar total y el amonio. En los resultados el amonio fue normal; sin embargo, se observó un ligero aumento del ácido biliar total (Tabla 2).
Dado que este aumento no se considera significativamente anormal, el paciente fue tratado momentáneamente con un hepatoprotector y se proporcionó un diagnóstico provisional de trastorno hepático de origen indeterminado en lugar de un trastorno hepático congénito. La operación de castración fue pospuesta como medida de precaución.
Después del tratamiento con un tónico hepático, Andy estuvo saludable durante un mes y no presentó ningún problema en particular. Sin embargo, con el fin de determinar los resultados del tratamiento, se midió solo el TBA y, como resultado, se obtuvo un nivel anormalmente alto (Tabla 4).
No pudimos confirmar la derivación portosistémica en una tomografía computarizada que se llevó a cabo para un examen detallado.
Examen ultrasónico abdominal: Se confirmó un descenso en la distribución vascular en el lecho vascular portal intrahepático.
Se sabe que los perros pequeños en Japón tienen una alta tasa de trastornos hepáticos congénitos. Aunque las derivaciones portosistémicas congénitas (CPSS, por sus siglas en inglés) o la anomalía vascular portosistémica (PSVA, por sus siglas en inglés) son especialmente comunes, los trastornos hepáticos congénitos se han hecho evidentes en los últimos años en los que no ha sido posible confirmar las anomalías vasculares, tales como las derivaciones o la hipoplasia primaria de la vena porta (PHPV, por sus siglas en inglés) o la displasia microvascular (MVD, por sus siglas en inglés). La PHPV puede coincidir clínicopatológicamente con las CPSS y, aunque no en todos los casos, el TBA puede utilizarse como un análisis de sangre que se puede emplear para las evaluaciones. Las CPSS indican niveles altos de amonio y TBA; sin embargo, una característica de la PVPH es que con frecuencia indica amonio a niveles normales y solo el TBA a niveles altos. Por lo tanto, la medición del TBA es eficaz en el diagnóstico diferencial. En los diagnósticos diferenciales, la hipoplasia de la vena porta se reconoce en los exámenes de tejido hepático aunque no haya anomalías vasculares en las tomografías computarizadas. En lo que respecta a los exámenes tisulares; sin embargo,
dado que los exámenes histológicos no son definitivos, no son recomendables en casos que no muestran síntomas clínicos. Por lo tanto, en el presente caso, además de un análisis de sangre, que incluye TBA, no se observó anomalías vasculares en la tomografía computarizada y se reconoció una reducción en la distribución vascular del lecho vascular portal en la prueba de ultrasonidos, se diagnosticó como PHPV (sospecha).
En el caso de Andy, fue posible hacer un diagnóstico rápido gracias a Abaxis Vetscan VS2 y se evitó los riesgos de una operación de castración. La operación de castración se completó sin complicaciones una vez que la condición de Andy se estabilizó y el propietario de Andy quedó muy satisfecho. Por otra parte, también se fortaleció la relación de confianza con la clínica. Las mediciones subcontratadas de TBA antes de la introducción de Abaxis VS2 requerían un tiempo considerable y también era imposible que nosotros pudiéramos proporcionar al propietario datos sobre un progreso satisfactorio. En la actualidad, gracias a Abaxis Vetscan VS2, se puede implementar mediciones de TBA fácilmente y sin la necesidad de esperar hasta la próxima visita a la clínica y, utilizando los resultados de la prueba de TBA, es posible minimizar inmediatamente el problema y hacer un diagnóstico diferencial. Creemos que, con base en los resultados, es un importante brindar un servicio que incluya tomografías computarizadas y otros exámenes detallados.
El TBA, que tiene una alta sensibilidad para los trastornos hepáticos, es esencial al momento de examinar los trastornos del hígado. En Japón; sin embargo, solo ha sido posible depender de la contratación externa para las pruebas de TBA y no ha sido posible obtener mediciones rápidas. Al utilizar el analizador químico VetScan, se puede obtener resultados del TBA en la clínica, lo que permite el diagnóstico y tratamiento rápido.
Artículo patrocinado por: