Factores de riesgo del cáncer felino y sus implicaciones en el cáncer humano
- 31 de octubre de 2011
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Un reciente estudio sobre el cáncer intestinal en los gatos ha proporcionado nuevas formas de entender esta enfermedad y sus causas. Los resultados en última instancia podrían beneficiar a los seres humanos.
“Estamos buscando patrones de desarrollo de cáncer en los animales, de modo que podamos encontrar los factores comunes de riesgo”, manifestó Kim Selting, profesora asociada de oncología en la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad de Missouri. “Fui tutora de una antigua residente, Kerry Rissetto, cuando examinaba a gran escala tumores intestinales en gatos, y creemos que podemos utilizar esta información para identificar eventualmente los factores de riesgo del cáncer y los tratamientos para los seres humanos”.
Utilizando una base de datos, los investigadores examinaron 1129 casos con los cuales se cubría 47 años de cáncer intestinal en los gatos. Los investigadores descubrieron que la mayoría de los cánceres intestinales felinos eran linfomas y que la mayoría se encontraba en el intestino delgado. Los investigadores además determinaron que la raza siamesa, especialmente los machos de siete años de edad o más, tenía un mayor riesgo de desarrollar cáncer intestinal.
“Esto es importante porque existen pocos estudios de base poblacional que nos permiten evaluar el cáncer y los factores de riesgo en una escala tan grande”, dijo Selting. “Los dueños de las mascotas deben estar atentos a la pérdida inexplicable de peso, vómitos y diarreas debido a que estos problemas pueden estar asociados con el cáncer intestinal”.
Selting indica que hacer un seguimiento al cáncer de los gatos es importante porque estos animales comparten el ambiente con los seres humanos. Mediante la observación de los patrones de desarrollo del cáncer, los médicos y los veterinarios pueden llegar a conocer los factores ambientales que podrían ser la causa de la progresión tumoral en diferentes especies, incluyendo los seres humanos.
“El cuidado de la salud animal puede predecir lo que podría surgir en el cuidado de la salud humana”, dijo Selting. “Por ejemplo, los perros son realmente la única especie, aparte de los humanos, que desarrolla el tipo más difícil de cáncer de próstata. Si se desarrolla un tratamiento que pueda ayudar con el cáncer de próstata, podremos probarlo en los perros y encontrar resultados con celeridad ya que el cáncer en los canes progresa más rápido que el cáncer en los seres humanos”.